Fotocrónica: Cronica de un campamento

En el día jueves 14 de enero un grupo de amigos acampo por cuatro días en este lugar maravilloso lleno de alegría y diversión. Desde la mañana temprano se podía observar como los oídos quedaban perturbados, al escuchar la fuerte cumbia que escuchaban habitualmente muchos de los campistas. Al mediodía, los parilleros se llenaban como una tienda en liquidación,las oyas hervían fideos o arroz tratando de conseguir algo de comer. Luego llegaban las largas partidas de truco que terminaban con un chapusón en la gran pileta del camping. Al caer la noche y terminar de cenar ya se podía ver como la sed alcohólica hacia que todos destaparan sus cervezas, abrían las cajitas de vino, preparaban sus tragos preferido y espesaba una buena noche con música y descontrol.

El 18 de enero la alegría se vuelve tristeza al abandonar tan buen lugar y volver a Bermudez y a la rutina de todos los días. Pero esa tristeza se mejora con una lluvia monstruosa de la ultima mañana que hizo que el partido de fútbol sea mas divertido con pantalones y zapatillas embarradas y fuertes resbaladas.