martes, 17 de abril de 2012

Malvinas – Historias en primera persona: “El dolor y la desilusión fue enorme”.


Nosotros, con nuestras acciones y omisiones cotidianas, con las 
elecciones que hacemos, escribimos la historia. Construimos relatos de "hacen sentido", nos contamos lo que nos pasó para entenderlo. La memoria colectiva se teje con el entramado de múltiples memorias individuales que resignifican desde diversos lugares el pasado. 
Vamos a compartir relatos recogidos por alumnos del Colegio Nuestra Señora de los Milagros. Se trata de los recuerdos de padres, vecinos y conocidos sobre la guerra de Malvinas, sucedida hace 30 años.

Por esos días se sentía una gran tristeza por lo que estaban pasando nuestros soldados. Más allá del respeto y de la valentía que tuvieron para enfrentar esta situación, se sentía también que no estaban preparados para semejante guerra (tanto en lo tecnológico como en lo psicológico), ya que se trataban de adolescentes de 18 años que apenas se estaban convirtiendo en hombres. En lo personalsentí admiración del pueblo argentino. Lo que más me llamó la atención fue su colaboración. Porque todas las personas entregaban lo que podían, ya sean cosas materiales o comestibles con toda la mejor predisposición posible. Las Abuelas de Plaza de Mayo, por ejemplo, tejían ropa para poder ayudar a los soldados a soportar el frio que pasaban. Contribuyeron a la causa también muchos famosos que hacían sus donaciones en forma anónima.
            Finalmente llegó la noticia de que las Malvinas ya no eran argentinas, y el dolor y la desilusión fue enorme. Pero no solo por la pérdida de territorio, sino además por los chicos que perdieron la vida o quedaron con problemas motrices o mentales por defender la patria. También quedo un sabor a impotencia por saber que todo el esfuerzo que hiso la gente para colaborar con los soldados fue inútil, ya que nunca recibieron estas humildes ayudas y la información que se daba a conocer en medio del combate era errónea, creando ilusiones y falsas expectativas al pueblo argentino.

Mujer – 44 años.

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